Hoy la noche se me hace eterna y en mis pensamientos sigues tú.
No puedo dormir ya que mi mente me la has vuelto a robar.
Son estos momentos de silencio los que me causan tanto miedo,el estar pensando constantemente en tí y cuál será el destino final.
Unas veces deseo que esto termine pronto por el inmenso dolor que me causa verte así y otras desearía que siguieras para no dejarte marchar y seguir teniéndote conmigo,nada más que a eso se le llama egoismo.
Quién me iba a decir que tu final sería este,el cruel destino ha pagado mal e injustamente.
Sé que ya no puedes más,que estás cansada y que te estás quedando sin fuerzas.
Para qué luchar?es que este sufrimiento,esta agonía va hacer que mejores?
A esta edad solamente se necesita descansar y ese descanso no lo tienes tú,tú tienes intranquilidad,miedo y una agonía difícil de superar.
Sabes que rezo a tu queridísimo Padre Pio,muchas veces no sé por qué lo hago,porque mi cabeza está confusa y ya no sé que es lo que le tengo que pedir,siempre termino diciéndole que sea lo mejor para tí.
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